Brillos

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Capítulo II: Ultimátum.

Capítulo II: Ultimátum.

***En el capitulo anterior…

         Negué con mi cabeza.

-Yo también te amo pero esto es tan difícil- Solté despacio mientras él se levantaba y con su mano hacia levantar mi rostro para darme un pequeño beso y luego mirarme con suplica.

     Todo era muy doloroso para mí.
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-Ya no sé si quiero seguir contigo, esto se enfrió. Esto ya no sirve- Solté impresionándome del peso de aquellas palabras.

     Sosuke me miro dolido, vulnerable con esa expresión no común en él. Se levanto con su rostro a un lado y paso un largo minuto, me lleve las manos a mis gafas para quitármelas y las coloque en la barra de la cocina.

-¡Ah!- Exclame porque el más alto me sujeto con demasiada rudeza la mandíbula,  me beso y me mordió el labio inferior justo sentí un sabor metalizado, me hizo sangrar en el acto.

-Esto no se acaba aquí eh Makoto- Me miro como retándome y salió de la cocina.

     Me toque el labio con mi índice y había sangre tome una servilleta para lavarme y notar que ese dolor no difuminaba la herida que él me había hecho.

     A la final no sé de donde había sacado fuerzas para tener la comida lista y llamar a los niños para que acomodaran la mesa, me di cuenta que Sousuke tenía ira en su rostro mientras veía la televisión en la sala.

-Otou-san ¿Cómo se me ve mi pollito?- Kaede-chan siempre queriendo ser el centro de atención de su padre…

     Estábamos todos en la mesa.

-Estás muy linda cariño- Sousuke le dio una dulce sonrisa a su hija.

-¿Estas de mal humor Ma-san?- Kaoru me sacaba de mi ensimismamiento.

-No cariño, solo es que…-

-Makoto esta así porque se lastimo el labio mientras cocinaba- Sousuke se llevaba a la boca una cuchara de curry como si todo lo que había dicho fuera verdad.

-Eres un…- Entrecerré mis ojos y retuve lo que quería decirle. –¿Esta muy rico el curry?- Sonreí forzadamente dirigiéndome a los niños.

     Cenamos y todos subieron a seguir en sus quehaceres de colegio mientras que Sosuke lavaba los platos y yo los secaba.

-Tu- Comencé… -Tu me dijiste que tenias algo que decirme- Titubee un poco.

-Sí, quería sorprenderte pero yo fui el sorprendido- Dijo el pelinegro bajando el rostro y ya habíamos terminado de lavar.

    Di un paso y justo sentí como me agarraba fuertemente de la muñeca, inmovilizándome.

-¿Recuerdas el puesto que quería en la oficina del aeropuerto como Sub Director del aeropuerto?-

     Trague grueso y asentí con la cabeza.

-Iba a ser un regalo de aniversario, me dieron el puesto… yo no viajare más-

     Mi corazón latió, ese era…

-Ese era el puesto que siempre habías querido para mí, para estar juntos, para convivir más con la familia-

     Me jalo lentamente y caí en su amplio y duro pecho.

-¿Por qué eres tan cruel conmigo?- Le dije taciturno.

-Déjame el control, dejemos todo a un lado- Sus palabras eran tentadoras pero yo lo sentía mucho.

-Lo siento, deberíamos de tomar un tiempo- Me aleje de su cuerpo.

-Yo me iré un tiempo con mis padres, espero que cuides a los niños- Solté de improvisto mientras comenzaba a alejarme.

      Él quería el control pero mi naturaleza no era dejar que otros tomaran el control y menos de una situación que me incluí tan directamente.

-¡No puedes!- Su voz demandante y su agarre me atrajo hacia él de nuevo.

-Sabes los problemas que tuve mientras estudiaba para piloto, sabes cómo me sentía-

-A ti te gustaba esa carrera no veo tu punto- Dije indiferente.

-Hubieron veces que me quise retirar y comenzar a estudiar en la marina nacional mis padres dijeron que no aceptarían tal tontería-

      No quería dejar fluir lo que tenia dentro de mi pecho, un sentimiento llamado odio por sus ausencias, por su infidelidad y por esta relación a la que yo solo me había sacrificado.

-Pero no lo hice, me dijiste que pensara bien las cosas, que yo podía y me sentí bien con tu apoyo… el punto a donde quiero llegar Makoto, es que ese verano donde en el festival se hizo un revuelo porque mis padres se enteraron de mi relación con un chico. Estuve a punto de terminar contigo pero no lo hice a pesar de que tú no querías que mis padres te vieran mal-

-Es diferente- Replique recordando también esa ocasión tan difícil.

-No te deje porque te amaba y es impresionante pero sigo amándote a pesar de esto años, si no me perdonas quizás no te vuelva a ver-

-¡Claro que nos veríamos! Tendríamos la custodia de los niños-

-Es contigo o sin ti, así de simple- Me atrajo y quedamos nariz con nariz y la determinación de sus ojos profundos era abrumadora.

-¿A q-que te refieres?-

-Me refiero que pelearía por la custodia de los niños y me iría lejos de este país y de tu preciosa cara-

     Al escuchar tales palabras solo sentí que estaba en caída, miedo.

-No lo harías… ¡¿Por qué siempre tienes que ser tan extremista?!-

-¿Por qué? Porque es contigo o sin ti, así de simple-

-Sabes que por la influencia de mis padres podrías perder por completo la custodia de los niños- Me volvió a hablar severamente.

     No quería perder a los niños… ni a él ¿Qué debía hacer? No podía creerlo, mis lágrimas empezaron a fluir.

-No lo hagas- Le suplique.

     Me tomo de la mano y me llevo a rastras, subimos las escaleras y luego llegamos a nuestro cuarto. Cerró la puerta tras nosotros.

-Sé que quien tiene que suplicar soy yo, así que no me supliques nada-

     Sousuke…

-Makoto ¿Aún me amas o no?-

    Me sentó en la cama y se arrodillo entre mis rodillas.

-Sí pero…-

-Háblame, dime…-

     Aunque dolidos, nuestros ojos estaban cerca.

-Siento que él que sacrifico más fui yo mientras tú solo estabas en tu trabajo y cuando me entero de Kimi-san ¿Cómo crees que me sentí?-

-Yo no sacrifique nada, yo también quería estar contigo pero mi trabajo era mi trabajo ¿Cómo voy a sacrificar algo si estoy con la persona a quien siempre quise monopolizar?-

     Ok, esas palabras me habían gustado mucho viniendo de él.

-Ahora seré solo un sujeto con un horario de trabajo moderado, con turnos flexibles ¿No era lo que ambos queríamos?-

     Justo me beso y me queje por mi labio roto, se detuvo para lamerme el labio inferior y luego adentrar su cálida lengua. El beso fue subiendo de nivel y cuando nos separamos yo era quien jadeaba más.

- Makoto ¿Cuándo podrás perdonarme?-

-Entonces este es mi ultimátum, si vuelves a traicionarme entonces esto se acabaría-

-Está bien…-

     Me comenzó a besar e ir levantándose para quedar arriba de mí luego me fue quitando mis jeans índigos y a la vez subió mi suéter verde hasta el pecho para succionar mis tetillas.

-Ah… Sou- Jadee mientras pasaba un lar rato saboreando mi pecho.

-¿Quieres que te lo haga?-

-Estúpido- Suspire.

Me subió a la cama para apoyarme en las almohadas, abrió mis piernas y lamio mi miembro.

-Quizás mañana no te vas a poder levantar-

     Me tape la boca con ambas manos mientras cerraba mis ojos por hacerme sentir tan excitado.

-Ah… ¡ah!-  Me succiono brevemente y uso mi esencia de lubricante con su dedo dentro de mí.

-Mmm…Sou, Sousuke-

—Gomenasai, no puedo aguantar

     Su voz estaba ronca y mire como se quitaba su camisa blanca dejando a mi vista su sensual cuerpo lo cual me hizo cegar de placer.

     Su miembro fue introducido de una vez. Me mordí mis labios para aguantar el dolor, nítidamente nuestras respiraciones altas se escuchaban en armonía.

-N-no te muevas aun… ah ¿ok?- Dije y me respondió asintiendo la cabeza.

-He estado con tantas ganas de follarte estos meses, no te imaginas ¡maldición!-

    Mis piernas alrededor de su cuerpo sintieron un leve movimiento hacia adelante y luego hacia atrás. Mi uñas se clavaron profundamente en sus hombros e ir a rasguñarlo.

—¡Ah! Ahh-ah

     Sus arremetidas eran una mezcla entre dolor y placer puro que me gustaba.

     Sentí una verdadera pena al acabar, nos abrazamos por un momento y sentí su lengua sobre la mía.
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            3 Meses después…

      Estos últimos meses han sido normales en mi concubinato, Sousuke ha estado más cerca de Kaede-chan y Kaoru-kun.

-Makoto, iremos a viajar estas vacaciones y quiero que estés listo para pasado mañana- Sosuke me besaba el cuello lentamente mientras yo estaba batiendo los huevos para la cena.

-¿Si? Pero si apenas hace un par de días me dieron vacaciones en el colegio- Replique haciéndome el fuerte.

-No importa, llame a mi madre y dijo que no tendría ningún problema en pasar tiempo con Kaede-chan y Kaoru-kun- A medida que me decía eso, sus manos se paseaban por mis caderas y por mi retaguardia.

-Mmm… me parece bien pero ya deja de hacer lo que haces, estoy cocinando y no respondo por un mal golpe- Dije sonriendo.

     Él se separo de mí y cruzo los brazos como molesto.

-Alquilare un baño privado en las aguas termales y me quitare estas ganas contigo… serás responsable tu solo por no poder caminar de nuevo-

-Jejeje no seas inmaduro Sosuke, que te haya dado tras meses de abstinencia no quiere decir nada-

     Chasqueo su lengua e hizo su rostro a un lado. Sonreí feliz, nos amábamos y todo retomaba un ritmo nuevo en nuestra relación.
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FIN

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Maid caritas De: Pervert Mind

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